Reciclaje: cuidar el planeta


 

 

20190527_213913

De un tiempo a esta parte, el ecologismo ha pasado de ser casi una moda, o algo que se miraba de soslayo, a ser una necesidad absoluta. Nuestro planeta nos pide urgentemente socorro y como no nos demos prisa en escucharle, tal vez sea tarde. Y son muchas las voces que desde el cine y el teatro nos recuerdan Una verdad incómoda, sea a través de historias de animales como La vida de Pi, Bailando con lobos o El oso o sea directamente a través de sus acciones reivindicativas, tan relacionadas con nuestro teatro como ocurre en Erin Brockovich o Acción Civil.

En nuestro teatro ya hace tiempo que el cuidado del medio ambiente tiene una notable nivel de protagonismo. Los delitos contra el medio ambiente ya son penados desde hace mucho tiempo, y también desde hace mucho tiempo existe la sección especializada de fiscalía, con su propio Fiscal de Sala al frente de la misma. Perdonadme el momento abuela cebolleta contando batallitas, pero todavía recuerdo los inicios de esta tendencia, cuando yo todavía era una fiscal en prácticas y quien hoy es fiscal de sala se devanaba los sesos para tratar de hacer posible la protección penal de esa joya natural de mi tierra que es la Albufera.

Juntamente con ello vino la preocupación por los incendios forestales, esa pesadilla que durante todo el año pero especialmente cada verano, se lleva por delante parte de lo que debería ser el patrimonio natural de nuestros descendientes.

Pero la preocupación por estos temas no debe limitarse a esas cuestiones de tanta trascendencia. En nuestro despacho diario de trabajo podemos poner nuestro granito de arena.

De hecho, algunas veces he contribuido a la causa sin saberlo, o, al menos, sin ser consciente de ello. Cuando yo estaba en ni primer destino, el Fiscal jefe nos obligaba a usar los folios por ambas caras y, además, nos instaba a no desperdiciar nada, por lo que los papeles inservibles los dejaba en medio de la mesa comunitaria donde entonces despachábamos nuestros expedientes para que los utilizáramos por el reverso como los que él llamaba “papel de sucio” Por aquel entonces, cuando la conciencia ecológica andaba aún en mantillas, sonreíamos pensando que se trataba de una extravagancia o incluso de un alarde de tacañería. Hoy, sin embargo me doy cuenta que aquel hombre era un visionario. Un visionario que, por cierto, iba cada día al trabajo con su termo de café u horchata según la época y su bocadillo envuelto en papel de periódico.

Sin embargo, iniciativas como esta no dejaban de ser una rara avis en nuestra Administración de Justicia donde, si algo se usa a cascoporro es papel y más papel, más incluso desde la fallida implantación del papel 0, que, en realidad, acaba no siendo otra cosa que un cambio de lugar de la impresora -ahora se imprime en el juzgado cuando llega en vez de llegar impreso por las partes-

No niego que somos viejunos y hay a quien todavía le cuesta estudiarse un documento si no es con el papel físico y subrayándolo con sus fosforitos, pero tal vez deberíamos pensarlo un poco mejor antes que desperdiciar tanto folio inútil. En realidad,  de cada causa mediana sobrarán entre la tercera parte y la mitad de sus folios, por la cantidad de veces que un mismo documento  -generalmente, el atestado- se fotocopia. Y eso por no hablar de los poderes de los procuradores, un montón importante de hojas que no se leen, y que seguro que hay otro modo de incorporar a las actuaciones sin necesidad de cargarse un arbolito con cada procedimiento. Que parece mentira que se hayan inventado chips donde cabe toda la información imaginable y nadie invente un modo de hacer más ligeros los procedimientos de papel inútil -del 0 ya ni hablamcos-

En cualquier caso, el colmo de los colmos en cuanto a reciclaje judicial son las estanterías hechas de cartón y cinta aislante que he visto en los Juzgados de lo Mercantil de Valencia y de las que ya he hablado en alguna ocasión. Aunque con la ampliación de instalaciones han mejorado algo, había momentos que nos sabía si entre los archivos se me aparecería el presentador de Briconanía o el mismísimo McGyver camufllado entre trogas y puñetas.

Otro de los clásicos es el uso de cualquier ingenio para evita que la salida del aire acondicionado nos traiga una pulmonía doble. Desde paraguas de los más variados tonos y colores hasta cartones colocados de modo estratégico y hasta artístico. Incluso a veces a juego con los ventiladores tradicionales de otros juzgados que, por el contrario, padecen de que el aire acondicionado no llega con suficiente fuerza. Será porque los edificios inteligentes son más bien tontitos.

Cualquiera de las personas que habitamos Toguilandia echamos mano de la imaginación en muchos casos. Yo sin mis posists no podría hacerla mitad de cosas de las que hago, y en ocasiones un clip te saca de un apuro. De hecho he visto jueces que los usan para sujetar esas puñetas rebeldes que con el paso del tiempo parecen querer huir de las mangas de las togas. Eso sí, que no topen conmigo que voy con mi hilo y mi aguja y les quito esas veleidades puñetero libertarias en un pis pas.

Los ejemplos serían muchos y no descarto, si hay aportaciones al respecto, embarcarme en una segunda parte de este estreno.

De momento, me contento con estas pequeñas muestras, y  dedico el aplauso a quienes con su ingenio las han hecho posibles. Y una vez más, a @madebycarol, mi estupenda ilustradora de cabecera, que nos regala la imagen de hoy.

 

3 comentarios en “Reciclaje: cuidar el planeta

  1. Desde hace muchos años, mis correos electrónicos siempre han llevado un encabezamiento, tratando de luchar en favor de la Naturaleza, haciendo recapacitar a quien lo recibiese mediante un mensaje.

    Desconozco si alguien lo asumió o no, pero lo intenté, al igual que otras acciones, pero ahora solo quiero compartirlo y si alguien quiere utilizarlo, (En la parte que implica el mensaje), tiene mi aceptación.

    El citado encabezamiento dice:

    VICTOR IÑÚRRIA MONTERO

    Abans d’imprimir aquest correu pensa bé si cal fer-ho / Més paper = Menys arbres
    Email hau imprimatu baino lehen pentsazazu ea beharrezkoa den / Paper gehiago = Zuhaitz gutxiago
    Antes de imprimir este correo piensa bien si es necesario hacerlo / Más papel = Menos árboles
    Antes de imprimir este correo pensa ben si é necesario facelo / Máis papel = Menos árbores

    Me gusta

  2. Pingback: Reciclaje: cuidar el planeta — Con mi toga y mis tacones – Solo Liliana

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s